Postura y agarre correctos en la lactancia materna
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La leche materna es el mejor alimento que puedes ofrecer a tu bebé, pero gran parte de su éxito depende de que adoptemos una postura y agarre correctos en la lactancia materna.
Cuando el bebé tiene un agarre correcto al pecho, succiona de manera rítmica, consiguiendo la cantidad de leche que necesita y estimulando adecuadamente el pecho de su madre para que siga produciendo leche.
Debemos de tener en cuenta que durante sus primeros días de vida el bebé es tan pequeño que el acto de succionar le supone mucho esfuerzo y ello, sumado a la capacidad tan reducida de su pequeño estómago, hace que sean muchas las tomas que tenga que hacer al día.
Por lo que no debemos pensar que nuestro bebé pueda pasar hambre o que nuestra leche no le alimente lo suficiente. Si nuestro pediatra no nos indica lo contrario, no tenemos de qué preocuparnos.
Postura y agarre correctos en la lactancia materna
Postura correcta y buen agarre del bebé
Conseguir una postura y agarre correcto durante la toma de pecho nos ahorrará la posible aparición de grietas, dolor al dar el pecho, mastitis o cólicos del lactante.
Debemos tener en mente siempre una máxima, la comodidad. Ante todo debemos sentirnos cómodas tanto nosotras como nuestro bebé, pues dar el pecho no tiene que ser un acto incómodo o que produzca dolor.
La práctica hará que poco a poco nos vayamos adaptando al acto de amamantar, pero hay algunos tips que nos ayudarán mucho a sentirnos cómodas durante la toma:
- Mantener apoyada la cabeza y hombros del bebé sobre tu antebrazo
- El cuerpo del bebé tiene que estar en contacto contigo “barriga con barriga”
- El pezón tiene que estar a la altura de su nariz (nos podemos ayudar de un cojín de lactancia para conseguirlo)
- El cuello del bebé no debe estar flexionado o torcido
- Debemos ofrecer el pecho al bebé cuando éste tenga la boca bien abierta (la boca del bebé debe abarcar gran parte de la areola de la mama)
- La succión será rítmica y sin ruidos (no deben haber chasquidos del bebé durante la succión)
- Por su postura, las mejillas del bebé estarán redondeadas y no hundidas
- La toma finaliza cuando el bebé acabe por decisión propia. Sin embargo, si queremos que suelte el pecho, no debemos hacerlo bruscamente, sino que introduciremos el dedo meñique con cuidado entre la boca y el pecho para romper el vacío.
Diferentes posturas para dar el pecho
Podemos alternar diferentes posturas o posiciones para dar el pecho, además de la tradicional postura del acunado.
Con ello podremos encontrar qué postura nos resulta más cómoda y estimular el pecho de manera más efectiva.
