¿Cómo tomar la temperatura del bebé?
 

Son varias las zonas del cuerpo en las que se registra la temperatura corporal, cuya medición nos indica si existe o no fiebre:

Axila o ingle: son las mejores zonas donde tomar la temperatura de nuestro bebé por su facilidad de acceso. (Estas zonas suelen estar medio grado por debajo de la temperatura corporal exacta)

Boca: es una zona bastante más incómoda donde lograr registrar la temperatura, básicamente porque puede que sea bastante inexacta en relación a la temperatura corporal real.

Recto: resulta desaconsejable que tomemos la temperatura del bebé en esta zona por la dificultad de introducir en y el riesgo de rotura o lesión que se pueda producir (jamás se deben utilizar termómetros de mercurio en esta zona)

Oído: la medición resulta muy fiable y rápida (escasos segundos) utilizando termómetros específicos para esta zona.
 

Tipos de termómetros
 

En el mercado existen diferentes tipos de termómetros con los que tomar la temperatura de nuestros bebés. Los podemos agrupar fundamentalmente en termómetros de contacto y de no contacto.

Dependiendo de la edad que tenga el bebé, nos resultará más útil y efectivo según sea el método que tenga de tomar la temperatura cada modelo.

 

Termómetros de mercurio: son termómetros de vidrio con mercurio en su interior (el mercurio se dilata al entrar en contacto con el niño mostrando los grados de temperatura) Sin embargo,  hace años que la Unión Europea retiró estos termómetros del mercado por su alto nivel de toxicidad en caso de rotura.
 

Termómetros de chupete: su mecanismo es igual que el de los chupetes convencionales,  pero tienen una pantalla LCD que nos indica la temperatura del bebé cuando éste lo succiona. Hay que pensar que este modelo de termómetros son para un rango de edad más acotado o específico (quizás nos veamos más limitados en su uso, hay bebés que no utilizan chupete)
 

Termómetros de oído: son muy precisos, toman la temperatura a través del oído, concretamente de la arteria carótida interna que pasa por un lado del cuello y por detrás de la oreja.
Su punta es suave y delicada, se coloca en el oído y su tiempo de medición (en escasos segundos) y su fácil y rápida lectura (pantalla digital) hacen que sea muy útil su utilización. Este tipo de termómetros se pueden usar durante un rango de edad mucho más amplio.


 

Termómetros digitales: Son los sustitutos de los antiguos termómetros de vidrio. Son muy fáciles, cómodos de usar y la medición es muy rápida. Funcionan mediante pilas, están fabricados con plástico (con lo cual se evitan posibles roturas) y su punta es blandida y flexible para que no haga daño al bebé.

Generalmente integran funciones similares a las de otros termómetros descritos: memoria de las últimas mediciones, advertencia de fiebre mediante aviso sonoro, apagado automático, aviso de finalización de la toma de temperatura, etc. Este tipo de termómetro es ideal para utilizar con niños más grandes, con bebés pequeños son más complicados de utilizar ya que resultan más molestos.




 

Termómetros de frente: se trata de termómetros de no contacto, que miden la temperatura del bebé a través de infrarrojos captando el calor que se emite en la frente de los bebés. Son muy rápidos, sin embargo, y aunque cada vez son más modernos y avanzados, su mediciones no son muy precisas.

Tiras de plástico: se trata de unas tiras que se colocan en la frente del bebé y miden la temperatura que tiene éste en un momento preciso. Estos modelos no están muy extendidos porque sus mediciones son más bien orientativas.