Juegos infantiles en la naturaleza
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La naturaleza siempre nos ha ofrecido todo lo que nos rodea, y no iba a ser distinto para el desarrollo de nuestro pequeño.
En la naturaleza podemos encontrar una gran cantidad de juegos que pueden llevarse a cabo, mejorando y adaptando todos los sentidos de los pequeños de la casa, como son los estímulos auditivos, estímulos visuales y estímulos táctiles. Seguidamente vamos a enumerar algunos de ellos:
En primer lugar podemos jugar a escuchar sonidos. Nos sentamos en corro y permanecemos unos cinco minutos en pleno silencio escuchando todos los sonidos del entorno. Transcurrido este tiempo, cada niño comentará los sonidos que más le han llamado la atención e identificará su origen. El siguiente paso es realizar el mismo juego pero con los ojos cerrados. De esta forma, los pequeños se darán cuenta que captan una mayor cantidad de sonidos, ya que hemos anulado uno de los sentidos, permitiendo un mayor desarrollo al resto.
Ahora vamos a cambiar de ejercicio y nos vamos a tumbar en el suelo mirando al cielo. Nos vamos cubriendo los unos a los otros con ramas y hojas hasta que tan sólo nuestro rostro quede descubierto. El ejercicio se basa en ver lo que transcurre de la naturaleza con ese campo de visión delimitado.
Ahora vamos a practicar un ejercicio de memoria y vocabulario muy interesante. Tenemos que decir una letra, y el pequeño deberá encontrar elementos de su entorno cuyo nombre comience con esa letra. Estableceremos un tiempo determinado y una vez transcurrido, el niño tendrá que enumerarnos todo lo que ha encontrado.
Otro ejercicio muy divertido e interesante es esconder dentro de un espacio de terreno un “tesoro”, y la labor de los pequeños será encontrarlo. Esto les ayudará a conocer mejor su entorno y a utilizar la lógica de forma correcta.
Como podemos ver, hay una gran cantidad de ejercicios interesantes que permiten que nuestros pequeños desarrollen sus capacidades desde edades bien tempranas.
